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375 g de lentejas
2 cubos de caldo
80 g de manteca
1 cebolla
1/2 taza de vino tinto
1/2 taza de crema de leche
3 rebanadas de pan lácteo
4 yemas
cebollín o perejil
Poner las lentejas en una cacerola, con 2 litros de agua.
Hervirlas durante 1 hora y media, a fuego suave.
Pasarlas por tamiz para obtener una crema y añadirle el caldo, dejándolo disolver sobre calor suave.
Picar grueso las cebollas y rehogarlas en unos 30 g de manteca, hasta que se hagan transparentes.
Mojar con el vino tinto y dejarlo hervir hasta que se evapore el alcohol, cosa que se reconoce con el olor.
Agregar esto a la crema de lentejas, hacer hervir unos minutos más.
Añadir la crema de leche y calentar apenas, sin dejar hervir, y condimentar a gusto con sal y pimienta recién molida.
Cortar el pan en cubitos y freírlos en el resto de la manteca.
Servir la sopa, poner en cada plato una yema, cebollín o perejil picado y costroncitos de pan.
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