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INGREDIENTES
6 A 8 PORCIONES
10 g de gelatina sin sabor
500 g de champiñones
250 cc de vino tinto
200 g de queso gruyére
150 g de tomates secos
150 cc de crema de leche
6 atados de rúcula
250 g de queso crema
6 cucharadas de aceite de oliva
6 rebanadas de pan lácteo
4 dientes de ajo
2 cucharaditas de pimentón dulce
sal, pimienta
PREPARACIÓN
Hidratar la gelatina con 100 cc del vino y disolverla al calor.
Hidratar los tomates secos con el resto del vino.
Cortar en juliana la rúcula limpia; rehogarla con dos cucharadas de aceite de oliva, el ajo picado, sal y pimienta.
Filetear los champiñones; sartenearlos con dos cucharadas de aceite durante 2 minutos.
Rallar el queso gruyere con la parte gruesa del rallador. Batir la crema a punto firme.
Reservar todo.
Escurrir los tomates.
Procesarlos junto con la rúcula.
Agregar el queso crema y la gelatina.
Procesar 1 minuto más, para unir todo.
Pasar la pasta a un bol.
Añadir los champiñones, el queso rallado y, por último, la crema.
Enfriar en la heladera por 10 minutos.
Cortar el pan en pequeños dados.
Dorarlos con el resto del aceite y el pimentón hasta que resulten crujientes.
Incorporarlos a la mousse cuando ésta empiece a tomar cuerpo, para que no se humedezcan en exceso y se mantengan crocantes.
Distribuir en copas pomeleras.
Volver a la heladera hasta el momento de servir.
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